martes, 24 de enero de 2012

Se la monté a un cocodrilo


Se sumerge en un mar de saliva y lagrimas. La noche cayó, y junto con ella cualquier posibilidad de besarle las manos. La luna se rige alta y cínica burlándose de las mediocres metáforas. Ni poetisa o musa que fuera la boba. Alguien la miro y vio un mechón verde que creció y creció hasta que los engranajes empezaron a girar dándole cuerda al reloj ¡Chan! El tiempo empieza a correr. "Es un cocodrilo que te sigue" dice un libro. El cocodrilo se come los recuerdos y los sentimientos, no perdona. Tic Tac, y hay varias canciones que valen la pena cantar, y hay varias cosas en las que no vale la pena pensar. Algo se hunde a lo lejos y parece un bote. Algo se sumerge en el Maelström y no se puede hacer nada. Solo queda seguir y seguir y seguir hasta que un luchador de artes marciales mixtas llegue y luego de un madrazo y unos cuantos golpes en la cara, de esos que dejan embobado a cualquiera, te saque a patadas de ahí y luego te escupa en la cara. Y después de eso vuelve el cocodrilo, quien se había ido de vacaciones a las Islas Caimán.



Tic Tac, el cocodrilo se come los recuerdos y los sentimientos, no perdona. Creo que le gusta el pastel de manzana y no las uvas pasas.

En los aposentos de una torre hay una damisela presa. El aliento del  héroe apesta, es comprensible, lejos de su reino no se puede lavar los dientes con frecuencia. Ademas la noche anterior tuvo que comerse una zarigüeya y dos sapos por que se le habían acabado las provisiones. El olor se le encierra dentro del yelmo, y cuando llega a donde la princesa (que por cierto estaba en sus días y  no tenia toallitas higiénicas) intenta darle un beso. Ella se quita y luego de una mirada de desprecio coge una escoba y sale a volar. El diablo había llegado la noche anterior y la había hecho suya. Nuestro héroe se encoge de hombros y piensa para si que mejor le hubiera sido estudiar Economía y Finanzas Internacionales que ponerse a salvar princesas solo por sexo.

Tic Tac, el cocodrilo se come los recuerdos y los sentimientos, no perdona el desgraciado. Si le aprietas el cuello te da dos golpecitos en el hombro y pide tiempo para respirar.

Y bueno, el efecto de las drogas no dura para siempre. Aveces uno es un cartoncito de LSD y ella te disuelve entre la lengua y el paladar y ¡plop! Estas en su cuerpo, lo recorres, pasas por los intestinos, donde te absorben den nuevo, llegas a su cerebro y ¡BAANG! Haces locuras, rompes la concepción del tiempo, le cambias la religión y el sexo y lo que piensa sobre las vacas y los pollos y la moralidad y la verdad y todas esas cosas que nadie entiende y luego te deshaceeeeees. Desapareciste, pero fuiste un buen recuerdo, de esos que no se olvidan. Pero la vida sigue y tiene que probar marihuana y peyote, o si es más atrevida quizás alguna clase de pepa, perica o pegante o si están bien, pero bien mal pues heroína y Kokodrilo... pero cuando se es LSD ¿Como se dice? Ah si: ¡Uno es una chimba!

Tic Tac, el cocodrilo se come los sentimientos y los recuerdos y esas cosas, su mandíbula no perdona. Sería lindo hacer un abrigo de cuero o salir con él de vacaciones a recorrer el mundo.

Intentemos:

Jeremías García Robledo fue un poeta, pintor, músico, escultor, novelista, ensayista e ilustrador ucraniano que viajo al cosmos bajo los efectos de un analgésico que utilizó un sábado en la noche para el dolor de muelas. Murió el día de navidad por una infección en el hígado, aunque dicen las malas lenguas que desde hace un buen tiempo sufría de asma, debido a su frecuente consumo de cigarrillo y opio. Su niñez fue algo traumatica así que decidió omitirla en su auto-biografía "El aguardiente en la cuna y el biberón en el bar" (Editorial Pachucos - 2012) que se vendió como pan caliente en las librerías africanas. Allí, mas exactamente en Guinea Ecuatorial, fue recibido con gran entusiasmo por los intelectuales mas grandes de la humanidad durante su gira "Seiscientos sesenta y siete pies sin zapatos", donde lo condecoraron con el premio EternetyTargusAngus que gano por su participación en ...



Tic Tac, ese reptil se come los sentimientos y esas cosas que ya no recuerdo... esa jeta tan limpia, esos dientes tan blancos, ese hocico tan largo que traga de todo. Dejemos la pendejada, dejemos el drama y vamos a despelucarnos un poco, que el cocodrilo dice que gasta las polas y la carne.

¡Bendito sea el olvido y la droga!

FIN.

domingo, 22 de enero de 2012

ELLA, YO ÉL Y NO SÉ

Creo que escribo mejor drogado
Con pepas de modalfinil besando mis neuronas
Se me tocaron los pensamientos
Y los sentidos se dieron cuenta que no importo

Se me desnudo la carne
A veces soy muy yo
Eso me preocupa
Tengo que empezar a….
¿A qué?

No sé si mi conciencia me golpeo ayer
Pero quedé adolorido
Me golpea por nada
Solo le robe parte de su cuerpecito
Después me lo comí sin gusto
Sin imaginación
Sin ni mierda
Eso ya lo escuché

Ay, si pudiera escupirlo
Sería tan triste
O bueno
Feliz en mi distopía

Se lo volvió a poner
Le quedo justo
Realmente no
Le hacen falta dos ganglios
También un diminutivo
Y las manos se quedaron cortas
Pero así le gustó
De hecho se ve joven
Me gustó a mí también
No.
Algo le falta
Creo que soy yo
O una parte de mí
Se me olvido


Sigo siendo yo
Al fin y al cabo no he perdido lo hombre
¿Lo hombre?

¿Eso qué es?

“Prostaglandina”
Eso es para mujeres
ah
Entonces no sé

No asistí ayer
Al funeral de mis huesos
Otra vez se me olvidó

Cerremos las conversaciones
Me arde el cuello
Concuerda todo como ayer

Ella no me quiere hablar
Dice que el amor la ahogó mientras la tocaba todita

¿Y yo que le puedo decir?

Quizás que sigo siendo yo
Y que me arde el puto cuello

No,
Ya no arde
Me molesta, me lo quiero quitar
En donde lo pongo

Ya sé
Se lo regalo a mi conciencia
Pero ya tiene dos
El mío y el de ella

Ella se lo quiso regalar
No es mi culpa

Se trabó esta mierda
Ya solo le queda un cuello
El de ella

El mío se oscureció muy rápido
Ya no sirve para nada
Lo boté a la basura
Es más educado que a la mierda

Pasan tres segundos y no me habla
No la quiero buscar
Reviviría muy rápido
Intercambiaríamos ojos
Me tendrían buenas noticias

Pero me hablarían en francés
Digo me verían en alemán

Eso de ver en alemán debe dar unas ganitas
Como de….
Mejor me quedo callado
Que tal otra vez me volviera a encontrar
Moriría para no creerlo

Y eso de morir otra vez me tiene como aburrido
Sin cuello sin vertebras
Sin café ni pepas
Ni humos caros ni caros movimientos
Hasta me gustó vivir
Que coincidencia

Sigo siendo yo

Y si me rescato de la depresión
Ya estoy rescatado
Rescatado por un hongo

Es querido el hombre
Me regaló alcohol
Solo para mí
Dijo que lo trajo de algo que no es tierra
Ni agua, ni luz
No me dijo nada el hongo marica

Me pidió mi espalda
Pero no se la regalé
Se la quería robar al final
Lo mande a donde trajo el licor

Me insultó
La verdad es que me sentí mal
Se la debí regalar
Hoy me arrepiento de eso

Borré lo que escuché
Lo pinté con sonidos

Ya no quiero hablar más de mi
Bueno un poco más

Diré que no asistiré a mi nacimiento
Ni a mi muerte
Me quedaré jugando con el pasto
Arrancándolo, y después fumándolo como en primaria

Si ya me gradué
Las cosas se complicaron después

Me fumaba cada rato
Cada segundo
Cada centésima
No, estoy siendo mentiroso
En una centésima lo hacía dos veces

Mucha superioridad
Eso no me identifica

Pasaron tres segundos mas
Y ella no volvió ha hablar

Dudo de ella
Porqué sé que no tiene final

En blanco lo que leí
Y en negro donde estoy escrito

Ya no mas con colores

Ella se tomó el suicidio de mi pecho
Me dejo feliz

Prefiero que no me hable
Prefiero que se duerma en mis libros
Prefiero que me sienta
Prefiero que su silencio me mate
Y que finalmente nos quememos en deseo

Debe ser jodido entenderme

Pero mas a ella

Si estuviera ahora
Agarraría sus cabellos
Los envolvería en mi corazón
Y mataría por última vez.

sábado, 21 de enero de 2012

Anónimo temporal.


Como jodido. Se me pasó el tren de las ocho y la contestadora no funciona.
No deseo hablar con nadie. Pinto no demora en llamar a pedir explicaciones, si se enterará de que no me importa, si supiera que con o sin mi las cosas seguirán siendo un mierdero en la galería.
Aquí mismito como que mejor desaparezco, ya ni falta haría por estos lares, ganas me sobran.
Que en las mañanas buscaba a Pilar y se había largado ya para el norte, en las tardes Ramirez y Gomez se me borraban del mapa, como es de suponerse se sumergían en algún billar... Las noches, ni mencionar las noches. Tomaba fotografías de un jarrón azul que me incitaba a lavarme las pestañas en ácido sulfúrico y Marcelita otra vez llegaba tarde de trabajar, "Marcelita, me tienes olvidado" le suplicaba con voz de niño, pero no escuchaba, ella nunca escucha, no es si no que le den cuerda y ella como que se olvida de que existo yo, existe un mundo, existe Marcelita.


Marcelita no es mi mujer, ella juega como hombre y le gustan las muchachitas. Es mi mejor amiga, porque habla poco, come mucho y una que otra vez peleamos por las mismas viejas, un día le dije "Intenta Marcelita y verás que te cambias de bando" y nos chupamos, nos sudamos cada pelito, nos tocamos las pupilas y los tuétanos, le mordí la frente, nada, ella tiene mini-testículos en reversa. 
¿Y en que estaba? A si, son eso de las diez con veintiochenta minutos y el reloj que no se calla me sube por el pubis chocándome las pelotas, exprimiéndolas como naranjas; para hacer amena la cosa saco a María de raíz y me la fumo. ¡Que delicia María, si así me haces volar que tengan cuidado los aviones porque no tengo pista de aterrizaje!  
El teléfono suena y mejor me hago gato ingrato, ring uno, ring dos, si no se calla me vuelvo león.
Ya pasó, debió ser Pilar para decir Hermanito estoy bien, le dejo mensaje para que cuando llegue me llame. No sirve ese aparato, por eso como que me medio cago en las máquinas y quisiera ser cavernícola, pero este planeta esta tan absorbido hasta el ojete por esas cosas que a uno le toca acomodarse. Me voy al lago, allí pienso mejor, pienso en todo, ¿Para que pienso?, yo quiero ser fantasma, polvo, aire, yo quiero importar y no importar ni un carajo. No hay necesidad de lanzar piedras cuando el lago ya está seco. No deseo ser una molestia. Una vez amé y  otras varias tiré por gusto, que uno se olvida dicen, pero que va, si uno se clava más adentro a cierta maldita, imaginándose que sería si y que tal que. No negaré que me enamoró de todas y a todas las quiero jugositas en mis muslos, que engañe a esa maldita como tropemil veces con la mente pero jamás tiré porque me importaba y claro yo como un ingenuo copito algodón me creí de que la cosa cambiaría. Ya que, si estoy en el lago y las piedras se tragaron todo, si María es a la que necesito y bien rica que si estaba envuelta en mi porrito.

Ramirez y Gomez me buscarán, ya digo yo, que si se enteran de que se me pasó el tren, querrán ir por algunas cervecitas y luego María otra vez, tal vez Sanchez se nos pegue ya que no tiene más pa' donde agarrar y yo invito a Marcelita, que ojalá me escuche y no esté haciendo deditos con una mujercita protestante. A Pinto lo veré ya despuecitos del sol naranja, le diré que ya no aguanto las obras mediocres de la galería, porque en estos tiempos todos se creen Da Vinci y las letras se rebajaron, cualquiera es poeta y escritor, ¿Y quien dice algo? Que cada quien despilfarre su existencia como pueda, a fin de cuentas los desesperados abundan, como aquella maldita que bien afanada estaba por todo y no corría ni a la esquina, si yo la vuelvo a ver (y más de una vez he alucinado que sea así) le meto su besito bien duro y la mordisqueo    para que le guste y le duela, bien merecido se lo tiene.
No tiene caso me voy para mi casa, por lo menos a llamar a Pinto para saber que tan urgente esta el asunto, el pobre me causa lástima, en sus días de veintiputo estudiaba artes en no me acuerdo que tan nombrada universidad, y juraba y re contra juraba que Dalí le lamería las botas, ahí está que se quedó en pañales (literalmente porque sufre de incontinencia) y su galería en el centro para aficionados, a medias le da para el arriendo.

María se fué, ya casí no dura conmigo, es furtiva y veloz, como las cosquillitas que esa maldita me hacia sentir con la nariz en mi pecho.
Como jodido, que a uno lo olviden en una galería, que a uno se le pase el tren, que uno tenga una mujer en la misma cama y le gusten las muchachitas, que uno tenga amigos a raticos, que a uno las piedras le recuerden bobaditas, que a uno le toque lidiar con un viejo frustrado, que a uno lo llamen solo por conveniencia, que a uno le huya ya María, que a uno se le pasen los años en una burbuja, que a uno que quería ser terminó no siendo, que a uno le calentaran abajito y le voltearan la mejilla, jodido, jodido, que no me de la cabeza para sacarme a esa maldita y los planes se hicieran bolitas de mierda, pero aun más jodido es quedarme aquí sentado esperando que lluevan nuevas palabritas para las invenciones altaneras de una tarde de sábado.







Los extraños no conocemos marte

Los extraños no conocemos marte. 
A mi me enseñaron que primero se apunta con una K-49 hacia arriba; que tenemos que exterminar los alienígenas proxenetas. 
Los extraños no conocemos marte. 
Porque los lobos nunca hablaran con libélulas. 
Porque los mendigos viven en munditos cálidos. 
Porque las manitas se hicieron antes que la cabeza. 
Porque se acabaron las pastillitas. 
Porque es jodido andar en el espacio. 
Los extraños no conocemos marte. 
Y ahora Carito se fumó la galaxia. 
Y Juanita se mordió la uña del pie. 
Y a Camilita la vieron tirándose a otro. 
Y a Clarita la dejaron bajo un puente. 
Los extraños no conocemos marte. 
Porque nos gustaba alguien y ese alguien nos jodió. 
Porque jodimos a otro y nos quedó gustando. 
Porque nos gusta joder y dimos gusto cuando nos jodieron. 
Porque andamos más jodidos y no gustamos un poquito. 
Los extraños no conocemos marte. 
Yo que hice bang bang hacia arriba y resulté tragandome un forastero de otro planeta, y es que conozco tanto de marte, como el sol de las luciérnagas.

jueves, 19 de enero de 2012

Domingo por la Tarde

Caen los rayitos de sol por tu pelo rubio
parece que jamás te ha tocado un niño
sabes más que yo
las palomas intentan volar
obesas
pesadas
como las tardes contigo
que me tienen las axilas sudadas
más no olorosas
quizás porque les da pena contigo
y yo les digo que se queden junticas
en los sobacos
que no estorben
entre tanto tu vas y vienes
a mi me rascan los huevos
me muevo
levanto el trasero y voy a la cocina
inspecciono a mi alrededor
tuerzo esa serpiente de metal
me sirvo un vaso de agua
pero yo quiero uno de Whisky
uno que se te suba a la cabeza
y te la empiece a batir
como las imágenes de tus paredes
o como los versos locos que quieres leer
te miro cambiar de habitación
un laberinto chiquito
soy un niño, no me puedo contener
te miro toda
!carnicería¡
las caderas
zigzagueo endemoniado
los muslos
no pienses mas
la cara
“Dios santo que niña tan linda”
prohibida
con un cartel que dice:
“No pase”
y mis ojos obedecen
me contengo
me detengo
freno en seco
y recuerdo esas mañanas
en las que éramos soldados
uniformados, imposibilitados
atrapados en el fondo de un cubo
mental, material
cuando mis diez pinceles
tocaron tu tronco
y quede estampado en una pared
me diste  la mano
y en el lomo de un dinosaurio
que cargaba con nerds
nos recostamos
y yo pensaba  en mariposas negras
que aun revolotean cadáveres de locos
y tu pensabas en bigotes
o humeantes notas de guitarra
jamás lo sabré
extraña posibilidad
empezó este juego
y no sé donde termina
si en una autopista abandonada
o en un túnel en la línea
si en tus labios delgados como plumón
o en tus mejillas chantillí
a mi me da igual
solo quiero escribir un poco
intentar hacer poesía
como un hijo bastardo de las letras
pensar en no pensar
quizás en enloquecer
a punta de yerbas
para dejar de sufrir
y asegurarme que no me importas
que al tiempo me importas
alejarme de ti es fácil
lo mismo acercarme
y dañarme
entristecerme, alegrarme
todo alternadamente
como los cuadros del ajedrez
fractal infinito
¿Infinito?
A veces deseo regresar a los cuentos
los cuentos oscuros de las mariposas negras
esas que vuelan bonito
en otros ratos me dan ganas
deseos
esos que no se aguantan
de explotar
ir a Egipto
encontrar una chica llamada Sue
montar en un camello
recorrer las dunas de su cuerpo
seco
momificado
y luego volar
como un globo de helio rojo
con pelos negros y ojos de revolver
y reventarme los sesos
alma “libre”
versos malos
El bufón que no hace reír
La ciudad que te hace dormir
Y el fin que está por venir

viernes, 13 de enero de 2012



Son las 13:22 y el reloj apunta a la pecera vacía.
Muevo la planta de mi pie derecho:arriba,abajo,arriba.
El café matutino expide vapor amargo y chillidos calientes.
Por la ventana, las sirenas de una ambulancia despiertan al viejo Joe de su siesta.
Pobre Joe, sale del apartamento con una escopeta de la guerra civil.
Nadie, solo los autos de la avenida principal.

¿Te vas?
Sigue durmiendo, solo pensaba.
¿El viejo de al lado anda de nuevo gritando hacia la calle?
Déjalo, lo despertaron.
Dulce venganza, me ha despertado a mi.
No creo que lo dejaras dormir bastante anoche, gritabas como loca, así que no te quejes.
Eres un puto.
Dices eso, ¿cuando eres tu la mejor amiga de mi novia?
Cállate, mierda, me voy.
Anda, no necesito más, tengo todo lo que quiero justo aquí:mi música, mis cervezas, mi droga y mis libros.
Jódete, sin una mujer no eres más que pelotas colgantes.

Cierra la puerta y se va con la típica expresión de indignación que toda mujer utiliza, cuando se entera que por más capas sensibles, todo hombre tiene semen.5778954.La llamo a ella.
15:12
Como el contestador me dejo maldiciendo aproximadamente una media hora, he salido al encuentro de un par de amigos. Alcohol y billar.
20:46
Llaman a la puerta.¿Quien carajos podrá ser?

Nena, te estuve llamando todo el puto día, ¿Donde estabas?
Podando un jardín, dame un poco de eso.
Estas sudada, cansada tal vez.¿Quieres agua?
Seré clara, tajante y tal vez sincera: Me acabo de tirar a otro y necesito las llaves de este apartamento ya que la mitad me pertenece.
El tiempo no es algo propio de la realidad, solo es un pequeño designio creado por la inhabilidad del hombre para reconocer que su existencia, equivale a no más de unos cuantos ciclos solares.Aún así, aseguro que se detuvo en ese instante. Ella siempre fue una mujer amable, con un índice de dulzura que provocaría diabetes y la delicadeza otorgada a toda damisela digna de un marido respetable.¿Que sucedía? 

¿Me entregarás las llaves si, o no?
Necesito un cigarro.
Regreso en tres días.
¿Que te pasa?
Para resumirlo, me cansé de nuestra monótona y cursi relación, si quiero acción he de buscarla lejos de alguien como tu, un artista sensible y realmente tierno, pero que no contempla la posibilidad de jugar a saltar un poco en la maldita cama.
Bien, ahora ella era zorra cuando siempre fue una mojigata...¿Que viene después? Ah si, me tire a su amiga y piensa que solo logro pintar unicornios verdes.¿A que juega?
Volteo para clavarle una mirada tajante y se ha ido, sin más que esas palabras y un gesto de malicia en la comisura de sus labios. Quería dejarla una vez me cansara de todo y había sido ella quién cortó el hilo y el dolor que se propagaba en mi, tenía su epicentro no se si en el estómago o el corazón. Y aquí espero, con las llaves en mi mano izquierda y mi par de pelotas colgantes.

lunes, 9 de enero de 2012

Pasillos, pepitas y Flacos.


Bastarditos negados, olvidados, traumados, asediados.
Bastarditos convictos y convenientes.
Bastarditos por convicción. Como yo.

Soy una bastarda desde hace poco y así me gusta.
Con la luna sobre mi nariz percibo olores orgasmicos, frío urbano, calor humano y genios con armadura de cartón que visten mi trayecto a la felicidad.
Estaba visitando al flaco, porque se me enciende el switch de la malparidez existencial si no lo veo.
Somos solo dos pedazos de carne y hueso sacudidos por el impulso y con la capacidad de hablar pendejadas.
El me susurra Te amo, y yo le respondo, bien, hágale que estoy de paso.
El toma mi cabello, lo huele y hasta le recita poesía vagabunda una que otra vez.
Abrazados y sudando como en un horno asador, me agarra la cintura y me dice con voz de chivo No te vallas que hace frío afuera.
Flaco yo solo quiero divertirme. Aunque admito que en mi pecho solo existe lugar para esas manitas y ese pelito de nena que me hacen perder la cabeza mejor que cualquier trago.

Otra vez caminando entre cucarachas, escucho ladrar mis calles de asfalto, el flaco me decía, yo te puedo llevar conmigo, vamos a Ingaterra cariño, allá me dan empleo como profesor y vivimos en una linda casa.

Recuerdo que solía pintar árboles púrpura, tocar el violin y bailar Ballet. Fuí al colegio de la congregación del santísimo corazón de Jesús y usé faldón hasta los tobillos. Solía asistir a la iglesia con mamá y papá, estaba en el coro y me echaron por cantar como foca ahogada, tenía medallas, trofeos y buenas calificaciones.

Poco a poco me adentre a una vida ajena a los "valores" inculcados por mis progenitores que pasaron a ser Doña Helena y Don Edgar. Comencé a estudiar psicología en La Católica. Entre análisis de comportamiento y estimulos mentales comprendí, que un loco no puede tratar a otro. Convencí a Don Edgar de que estudiaba y fue así como di con un buen empleo.
Era fácil. Servir una, dos, diez, veinte copas de alcohol, bailar treinta minuticos en una barra, mojarme los senitos con Whiskey y largarme con un fajo de billetes.

Conocí al Flaco un día que no sabía mi nombre, me llevó a su apartamento de burguesito moderno y me dio sopa de pollo. Me leyó algo de un tal Neruda sobre besos y otras cosas ridículas, le presté atención solo porque olía bien y se movía aún mejor. Desde ese momento no existieron más flacos deliciosos, solo él.

Me les perdí a Doña Helena y Don Edgar. Jodieron con los tombos unos cuantos meses, después este bulto pasado por hija fué olvidado. Se quedaron educando a Jacobo y no se si al fin deseó ser ingeniero o proxeneta.

Eres mejor que esto, me dice el Flaco cuando llego sin bañar y algo viajada a su apartamento, vuelve con sopa esta vez de tomate y deja el estéreo en una estación de soft rock diseñada para morir una bonita y naranja tarde de sábado.Besito por aquí, besito por allá, las piernas temblorosas como gelatina y yo me pregunto ¿Este imbécil se enamoró o la sopa de tomate lo pone así? Terminamos y yo me acomodo la melena. Ya vuelvo.
El Flaco sabe que puede ser en una hora o un mes.


Me encuentro con Pepitas, un tipo con cara de cerdo y cuerpo de oso. ¿Entonces que Pepis? Pero que muñeca, ¿viene por más?
Claro que sí, que creía. Paga en efectivo o en afectivo princesa. No tengo plata, pero vamos al baño y me da luego lo mío.
Pienso en El Flaco y sus pequeños ojitos, sus labios delgados, su mirada de perrito abandonado, su cuerpo tembloroso tomando mi cintura. Yo como que me voy al fin del mundo con él.

Desearía no tener a este oso-cerdo respirándome en la cara y rasgandome todita.

Y que vuelvas reinita. Al salir busco el baño de nenitas bessoudas, me meto un dedo hasta la garganta y vomito.Pero valió la pena, lleno mi jeringa, un centímetro...Mi flaco como lo quiero...dos centímetros, me voy con usted a su escuelita extranjera y toco violín, luego nos encerramos en la biblioteca... tres centímetros, Flaco me pesan los ojos, léame a Neruda ¿Le parece?...Cuatro centímetros Deme sopita de tomate a ver si me atrevo con eso del amor. Flaco inyectese un poquito, le regalo mi aguja y este cuerpecito que queda tirado.

domingo, 8 de enero de 2012

Maldita cobardía

Solo se me ocurrió.
Bueno.
A mí no fue, fue a él.
¡Detrás, detrás, detrás!                  
 
Pero gira la cabeza con cuidado, no vaya a ser que choques nuevamente con la frustración de tu vida perdida. Ahora concentra todo tu ser en aquel recuerdo que machaca, machaca, machaca tu cabeza…
Estabas frente a mí. No. Espera. Espérate. Tú no estabas allí. Me dejaste. Fuiste a fumar hierba y a tocarte sin mí. Ahora entiendo. Yo a ti te odio, te odio, te odio, te odio, te odio. ¡Mierda! Puedo odiarte más y más, pero jamás te amaré menos…

Yo siempre quise que Blas se muriera, desde hace mucho tiempo lo quise. Todas las noches lo mataba de a poquitos. A veces le quitaba un brazo o dos. Pero lo que más le dolió fue cuando le quite la lengua y la sepulte debajo de mi colchón. Recuerdo que él gritaba mientras la lengua se movía, saltaba como si estuviera sufriendo. Pero yo no creo que Blas estuviera sufriendo porque él no sangraba, ¡NO SANGRABA!
¿Ahora entiendes?
Cualquiera odiaría a alguien que no sangre.

En fin, poco a poco Blas se fue muriendo. Su piel era blanca pero ahora era verdecita. Solía tener dos piernas pero ahora sólo tenía una. Solía tener dos ojos pero ahora sólo tenía uno. Solía tener una boca pero ahora sólo tenía…a no sí, seguía teniendo una boca pero esta sólo tenía un diente. Su aspecto era desagradable para los demás, menos mal yo lo tenía escondido en el sótano, para que nadie le dijera lo feo que estaba. Sin embargo él nunca me dio las gracias. Creo que fue porque no tenía lengua y entonces no podía hablar. No, no lo creo, ¡él es un desgraciado!

Como decía, después de que yo jugará unos días más con Blas él se fue. Aún no se adonde. Mi mamá dice que me está cuidando desde arriba pero mi papá dice que se fue a la mierda. Aunque otros dicen que él nunca existió. A veces me confundo y lloro por las noches. No lloro por él, él no me importa. Lloro porque ahora sí que estoy sola. No mentiras. No lloro porque estoy sola, lloro porque el idiota me engaño. Yo creí que él me quería, así sea un poquitico. Yo se que a él le gustaba que yo lo mordiera y lo lastimara porque a él le gustaba el dolor. A ambos nos gustaba. No entiendo porque me engañaba. Yo a él sólo quería destrozarlo desde adentro, pero a ambos nos gustaba. Nos gustábamos. ¡Maldita sea! ¡Maldita perra! Nosotros nunca pensamos cómo vivir, sólo vivíamos y ya. Mientras que tú le dañaste la cabecita, esa cabecita que a mí me gustaba tanto golpear…Te metías al sótano mientras yo me drogaba… ¡y tú lo robabas!  Lo dejabas sin libertad mientras lo llevabas a comer disque carne en salsa con papa con vegetales con jugo de mandarina con helado y disque al médico para que recobrara su deliciosa piel blanca… ¡BASURA!

Fue entonces ese 101 de Septiembre que entré en una depresión inimaginable. La tristeza vino sin ser llamada y sin ser esperada. La nostalgia inundó de nuevo mi corazón y mis lágrimas sabían a sangre fea. Tenía muchos celos. Aún los tengo. Me acurruqué en un rincón del baño y me corté las pestañas, por poco y me corto lo ojos pero justo antes de hacerlo un golpe, un golpe que incluso hoy en día sigo escuchando, me hizo estremecer. Salí corriendo de mi cobardía y entre con afán al sótano de mi amor. Encendí una lámpara que estaba medio rota (por el golpe que le di a Blass con ella) y lo vi allí…tirado en el piso con sangre.
Así es, sangre. Supe de inmediato que algo andaba mal, realmente mal. Lo levanté y lo que vi fue…fue…fue…agg eso envenenó mi alma…era ella. La mató. Estaba bien muertecita. Es como si tu pareja hiciera el amor 6mil veces con otro, pero peor, cien mil veces infinitas peor. Creo que primero le dio un mordisco en el cuello. Al rato le rompió los dedos, uno por uno. Tiempito después le sacó los ojitos y se los metió por el culo. Solamente creo, yo aún no estoy segura de lo que sucedió. Después me agache para darle un beso a la difunta. Giré para verte detrás de mí, pero tú no estabas. Habías desaparecido y no estabas en frente a mí. Fuiste a fumar hierba y a tocarte sin mí.

Mamá dice que me estas cuidando desde arriba, papá dice que te largaste a la mierda, el resto dicen que nunca exististe y yo sólo sé que no tengo ni la más jodida idea de cómo saliste del sótano. Pero aquí lo único que importa es que yo te odio.
Y te odio.